El maestro Guido López Gavilán, conductor de la velada.
La Orquesta Sinfónica Nacional este domingo hizo derroche de interpretación, dirigida por ese gran maestro.
El publico aplaudió convencido de la alta calidad interpretativa y escuchada en el Auditorio Amadeo Roldán de Ciudad de La Habana.
Hubo reconocimientos a un grupo de sus fundadores y al Teatro Nacional de Cuba, organismos vinculados a la agrupación desde su creación, el ICAI y el Ballet Nacional de Cuba, organismos vinculados a la agrupación desde su creación. La lista de los reconocidos, encabezada por Domingo Aragú, padre de la percusión sinfónica cubana, implicó a otros instrumentistas, copistas y promotores, muchos de ellos presentes y otros a los que se les hará llegar, a nombre de los cuales habló el también violinista Gregorio Corzo Lizaso.
Roberto Valera, vicepresidente de la UNEAC, quien valoró lo que significo la ley número 590, del Gobierno Revolucionario, por la cual se creó la Sinfónica.
Vicepresidente de la UNEAC Roberto Valera.
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